**1. Recepción y verificación de mercancías**
Una de las funciones fundamental del almacenista es la recepción de las mercancías.
Esto implica verificar las entregas, para asegurar que los productos que se reciben sean correctos y estén en buen estado.
El proceso de recepción incluye comprobar la cantidad y calidad, así como el estado de los embalajes para su almacenamiento.
Si en algún momento detecta una diferencia o desperfecto en la mercancía recibida, deberá notificarlo para que se tomen las medidas al respecto.
**2. Gestión del inventario**
El almacenista también juega un papel fundamental en la gestión del inventario.
Esto incluye llevar un registro detallado de los productos en stock, realizar auditorías periódicas de inventario y asegurarse de que todos los productos estén etiquetados y almacenados correctamente.
También se encarga de realizar los ajustes por pérdidas, obsolescencia o deterioro de cualquier mercancía, para garantizar que la información del inventario se encuentre actualizada.
El control de inventario es crucial para evitar pérdidas y desperdicios y para asegurar que los productos estén disponibles cuando se necesitan.
**3. Organización y almacenamiento**
Los productos deben ser almacenados en el lugar adecuado, de forma que sean fácilmente accesibles y se encuentren protegidos de eventuales daños.
Para ello, el almacenista debe tener en cuenta diferentes factores como por ejemplo el tipo de producto, sus condiciones correctas de almacenamiento, el espacio disponible y la rotación de la mercancía, entre otras.
**4. Preparación y despacho de pedidos**
La preparación y el despacho de pedidos, junto con la gestión de su salida, son tareas esenciales del departamento de almacén.
Esto implica seleccionar y empaquetar los productos de cada pedido de forma eficiente para garantizar que los pedidos estén correctos, lleguen a tiempo y en óptimas condiciones a los clientes.
La eficiencia en este aspecto es fundamental para garantizar la satisfacción del cliente y la eficiencia operativa de la empresa.
**5. Mantenimiento y seguridad del almacén**
Finalmente, el almacenista es el encargado del mantenimiento y la seguridad del almacén.
Esto va más allá de mantener el almacén limpio y ordenado, ya que también debe asegurarse de que se cumplan
las normas de seguridad para la manipulación y movimiento de las mercancías.
**Requisitos**:
- Disponibilidad para rolar turnos
- Experiência en manejo de productos congelados indispensable